Te doy mas que mi corazón, una vida para ti. Para amarte, adorarte, servirte dentro de mi. Te doy lo que soy, porque sabes que mi vida es pequeña sin tus manos, ni tus palabras. Por eso vengo a darte todo mi yo. Me pongo ante ti, entregarte mi pasado, poner mi futuro y control...mi presente ante ti. Porque se que mi presente hoy por hoy eres tu porque te amo.

Quitaste todo lo demás para poder amarte y desearte mas para querer sentir mas tu tacto sobre mi, que paralizo mi rumbo. Para poder sentir mas aun tu propio corazón. Son ilusos los que no van a ti con el deseo de amarte por querer sentir cada amanecer en el corazón, que dispongas ante nosotros un rumbo nuevo para ese día que haga brotar la magia de una sonrisa puesta en tu rostro y alma.
Gracias señor por cogerlas riendas de mi vida y mas aun las riendas de mi corazón.
Gracias.

Gracias oh padre por ser tu quien llena mi vida y pone en mi el camino en el cual yo intento andar apoyada en tus brazos, para no tropezar en la piedra de mi inepta ansiedad.

Gracias por ser tu quien llevaste mis temores y culpas contigo. Por quitar el dolor, la ira, y el temor, por quitar mi mancha del pecado, mi pecado pero tu lo echaste a la basura y venciste mi miedo, ganaste luchando por mi y por eso estoy aquí, hoy, para entregar todo lo que soy y ponerlo de rodillas para que seas tu quien aguarda mi caminar y levantar mi fe y amor, quien hace que luche por seguir sus escrituras y amarte y adorarte en mi vida.
Te amo, querido padre.
Te amo por sostener mi vida.

Tamy